Ultimos entrenamientos antes de la cita en Botamarges para el proximo sábado. En este caso, una prueba que inicia su andadura en Sant Joan, aprovechando las fiestas del Cristo. Para ser la primera vez no ha estado mal: una camiseta técnica chula, una bolsa, avituallamiento con fruta al final y agua en medio, chip... Problemas en la salida con unos 10 minutos de retraso.
Pero bueno, allí estábamos Elias (que no se animaba desde la media maratón de Almansa) y un servidor.
Ya casi se me había olvidado de porque me gustan tanto las carreras de montaña: ¡que aburridas son las de asfalto!. Un km detrás de otro, todos iguales, todos pendientes del reloj, del ritmo, de la velocidad... uffff. Pero bueno, mi intención era aprovechar esos 10 km de entreno, a un ritmo aeróbico alto y así ha sido (170 de media) para acabar en unos 50 minutos. Contento.
Allí estaban Pasqui, Nico y el resto de triatletas, Rafa B, compañeros del Voramar... es lo bueno que tienen las pruebas en casa, que tienes ocasión para charrar con mucha gente. Además he podido conocer en persona a Juanma (Atotrapo), que ya era hora, después de haber recorrido los 100 km de la Aneto sin cruzarnos.
LO MEJOR de la prueba, que han venido mi padre y mi hijo Pau, que ha participado en la minicarrera de prebenjamines, y hemos disfrutado de un buen rato juntos.
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